© Oleg Boshkov
Señoras, Señores,
Permítanme en primer lugar expresarles mi entusiasmo y el honor, como Concejala Delegada de la Ciudad de Charleroi, de encontrarme hoy entre ustedes.
La Fédération Cynologique Internationale vive hoy una etapa importante de su ya nutrida existencia al inaugurar su nueva sede social en infraestructuras modernizadas y confortables.
Es una satisfacción para todos.
En sus estatutos, la FCI aspira entre otros objetivos a promover y apoyar la cinología y el bienestar de los perros en todo el mundo.
Un objetivo ambicioso, porque nunca se subrayará suficientemente el indefectible vínculo que desde milenios une al perro y al hombre.
Compañeros de fortuna, guardianes fieles, inestimables asistentes de trabajo y formidable apoyo en nuestro día a día, los perros forman parte íntegra de nuestras vidas.
Por su parte, la ciencia aporta cada vez más pruebas de algo que ya percibimos intuitivamente, y es que la salud y la felicidad de las personas están íntimamente ligadas a la salud y la felicidad de los perros.
Éstos se adaptan de forma singular a vivir con el hombre, al que tan bien comprenden.
Esta cualidad, además de hacer de ellos maravillosos compañeros, también convierte a sus dueños en responsables de su salud y su bienestar.
Así, cada vez que un propietario descuida sus responsabilidades con su animal, se resiente el vínculo que los une.
Por ello todos debemos trabajar permanentemente para mejorar las condiciones de vida de los perros en todo el mundo.
En cualquier parte, los perros están expuestos a los mismos problemas, como la falta de vacunación contra las enfermedades infecciosas, una alimentación inadaptada, la falta de ejercicio físico, el aburrimiento, la ausencia de vínculo social o los problemas de conducta.
Sin embargo, el tratado de Lisboa de la Unión Europea reconoce a los animales como seres sensibles, lo que significa que son capaces de sentir placer y sufrimiento.
Es pues un deber moral para todos combatir cualquier forma de maltrato animal.
A este respecto, permítanme expresar públicamente nuestro mayor agradecimiento a la implicación y al apoyo de la Fondation Prince Laurent a la causa del bienestar animal.
Asimismo, felicitamos con entusiasmo a la FCI, que se preocupa del bienestar de los perros de todo el mundo.
La FCI considera su salud, su carácter y su comportamiento como puntos esenciales para alcanzar este bienestar, y apoya todas las actividades y disciplinas caninas deportivas consideradas beneficiosas para los perros.
Tales perspectivas y valores deben ser compartidos por todos, según los principios de juego limpio y finalidad humanitaria que persiguen, y donde se prohíbe expresamente cualquier tipo de discriminación.
Dichas perspectivas y valores participan también en una cierta idea de felicidad, de suerte que tienden puentes hacia una humanidad y una fraternidad más sólidas entre los pueblos.
Precisamente, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó este día, 20 de marzo, Día Internacional de la Felicidad. Como si fuera una predestinación...
Porque la Fédération Cynologique Internationale reconoce también a través de sus acciones que la felicidad y el bienestar no son sólo aspiraciones universales, sino que deberían tenerse más en cuenta en los objetivos políticos.
© Oleg Boshkov
En Thuin, como en Charleroi, los responsables se esfuerzan día a día por buscar el bienestar que deben a sus habitantes, pero también a sus animales. Gracias a ello nuestras dos ciudades tienen cada una desde hace años un Concejal de Bienestar Animal.
La felicidad de Thuin, hoy Capital Mundial del Perro, no debe hacernos olvidar que Charleroi, Capital del Cómic, es también la patria de los personajes Bill y Rantanplan.
Un simpático aspecto entre los muchos que unen profundamente a nuestras dos ciudades, sumado a la amistad que también, quiero poner de relieve, une a sus respectivos regidores.
Reitero mi agradecimiento a todos los organizadores por haber asociado Charleroi con este magnífico evento.
¡Y buen viento a favor para la FCI!
Gracias,